El tiempo vuela: Todo lo que debes registrar de tu hijo y cómo hacerlo

El tiempo vuela: Todo lo que debes registrar de tu hijo y cómo hacerlo

Hay momentos en la vida que pasan en un abrir y cerrar de ojos: la primera palabra, el primer dibujo, esos piecitos que apenas tocan el suelo, las manitos que se aferran fuerte a la tuya. Cuando te das cuenta, tu hijo ha crecido, y ya no es tan chiquito como ayer. Por eso, esta nota se titula “El tiempo vuela: todo lo que debes registrar de tu hijo y cómo hacerlo”, pues es una invitación amorosa a conservar todo eso que, aunque parezca inolvidable e impermeable al paso del tiempo, mañana será un recuerdo invaluable que si no cuidas hoy, podría diluirse en el tiempo y perder la nitidez que tiene en este momento.

Capturar la infancia no es solo tomar fotos. Es guardar huellas, dibujos, sonidos, palabras, frases e ideas geniales, gestos y momentos. No se trata de crear un archivo perfecto, sino de dejar una pequeña cápsula del tiempo hecha con amor, color y creatividad.

Ideas sencillas para registrar cada etapa con materiales que ya tienes

Para guardar por siempre esos momentos deliciosos, no necesitas más que unos cuantos útiles escolares y ganas de mirar a tu hijo con ojos de asombro. Aquí te damos algunas ideas:

1. Estampado de manitos y piecitos

El tiempo vuela, todo lo que debes registrar de tu hijo y cómo hacerlo

Con témperas de colores suaves o muy brillantes, pinta la planta del pie o la palma de la mano de tu hijo y estampa sobre una hoja de cartulina blanca. Es cierto que puedes utilizar papel, pero la cartulina soportará mejor la humedad de la pintura y se mantendrá firme por más tiempo.  Puedes escribir la fecha, su edad y una frase corta como “Estas fueron mis manos a los 2 años”. Si haces esto cada cierto tiempo, verás el crecimiento reflejado de forma hermosa. Es un recuerdo lleno de ternura que te hará sorprenderte de cuán grande está tu pequeño.

2. Su primer autorretrato

Invítalo a dibujarse a sí mismo con plumones o lápices de colores. No importa si lo hace con palitos o líneas muy simples al comienzo, eso es lo que lo hace tan especial. Guárdalo en una carpeta o cuélgalo en su cuarto con su nombre y la edad con la que lo hizo.

3. Álbum de dibujos

El tiempo vuela, todo lo que debes registrar de tu hijo y cómo hacerlo

Reúne sus dibujos más representativos y pégalos sobre hojas de colores usando goma en barra. Puedes agregarles pequeñas descripciones: “Así dibujaba una casa a los 4 años”, “Su primer dinosaurio”, etc. Con el tiempo, ese álbum se convierte en una obra de arte única.

Lée esta nota y sigue las instrucciones para crear el mejor álbum casero jamás hecho.

4. Cartas del presente para el futuro

Escríbele una pequeña carta contando cómo es en este momento: sus frases favoritas, lo que le da risa, lo que sueña, qué le gusta comer. Deja que él también escriba o dibuje algo y pega muchas fotos. Puedes hacerlo cada cumpleaños o cada año escolar.

5. Video diario espontáneo

No necesitas edición ni grandes producciones. Graba pequeños momentos de la vida diaria: cómo canta, cómo baila, cómo dice tu nombre. Esos videos naturales serán los más valiosos cuando quieras volver atrás. Guarda todo en una carpeta con fecha y haz las copias correspondientes para no perderlos.

Apensar de que quieras guardar a tu pequeño en un bolsillo para cuidarlo y que siempre sea así de chiquito y cercano, no existe un botón para pausar el crecimiento de nuestros hijos, pero sín duda podemos guardar y atesorar pedacitos del camino. Con témperas, lápices, fotos y palabras, podemos construir una memoria visual y emocional que los acompañe (y nos acompañe) toda la vida. Porque el tiempo vuela… pero los recuerdos que haces hoy pueden durar para siempre. ¿Y tú, qué vas a guardar de tu hijo esta semana?