Cuando pensamos en un bolígrafo o lapicero, pensamos en una función práctica, puramente funcional y nada artística. Pensamos en escribir una lista para las compras, o en anotar la información de una materia en un cuaderno o pensamos en la firma con la que debemos cerrar y oficializar un contrato, pero pocas veces pensamos en un lapicero como una herramienta artística. 

Cuando pensamos en arte y materiales artísticos, inmediatamente pensamos en pintura, pinceles o carboncillo, y pocas veces incluimos herramientas del cotidiano como el siempre fiel lapicero. 

Pues tenemos noticias para ti: el lapicero es una herramienta muy versátil y útil cuando se trata del dibujo artístico. También es un básico en la creación de un Bullet Journal o en el diseño de un buen Studygram y mapas mentales.  

¿Eres fan del dibujo y de los Bujos y quieres saber cómo aprovechar al máximo tus lapiceros?, entonces sigue leyendo, pues en esta nota te dejamos varias recomendaciones para que explores tu talento y aproveches al máximo tus bolígrafos.

Escoge bien tus materiales:

Lo primero que debes hacer es conocer las herramientas con las que vas a trabajar. Hay lapiceros de punta gruesa, media y fina. Otros tienen tinta de Gel por lo que secan muy rápido, mientras que con otros siempre te mancharás las manos o incluso tu dibujo.

El lapicero Speed Dry de Artesco tiene tinta de gel, punta de 0.7mm y Soft Touch justo en la zona de agarre. Su cuerpo es ergonómico lo que lo hace ideal para personas zurdas y además tienen un diseño moderno y estéticamente bello.

Al ser de secado rápido, el Speed Dry no mancha las manos ni el papel, por lo que no malogra los dibujos en proceso y al tener tinta suave, corre sobre cualquier papel sin dejar de dibujar y viene en negro, azul y rojo.

El papel:

Es cierto que cualquier superficie puede servirnos para hacer un dibujo simple o muy detallado, pero cada papel tiene características específicas que debemos tener en cuenta al momento de elegirlos. 

El papel bond, por su color, nos permite notar cada trazo o punto por finito que este sea, incluso el que hicimos por error al dejar caer el lapicero. Por otro lado, el papel kraft requiere trazos más fuertes y disfraza pequeños errores por su color más oscuro. Ambos tipos de papel son lisos y permiten que el lapicero corra fácilmente en líneas ininterrumpidas. Pero si queremos trabajar con un papel como la cartulina para acuarela, seguro tendremos que tener mucho cuidado pues es un papel granulado con gran carga de textura que puede cambiar el dibujo que estemos creando. Como estos, existen muchos tipos de papel que servirán para un propósito específico y solo debemos estar atentos a sus características para elegirlos bien.

Técnica de puntos:

El puntillismo es una técnica que se basa en construir una imagen a partir de pequeños puntos. Estos se colocan muy juntos o separados para dar la sensación de volúmen, sombras y luces y no necesita líneas de contorno para definir las formas. El lapicero es una herramienta muy adecuada para este tipo de dibujo, sobre todo si tiene punta fina y tinta gel. Es importante que en ésta técnica manejemos la densidad de cada punto, pues si el bolígrafo bota mucha tinta, podría cambiar por completo un ojo, oreja o pliegue de la mano que estamos dibujando.

Técnica de líneas:

Este tipo de dibujo puede lograrse muy bien usando un buen lapicero que corra fácilmente, tenga un color de tinta intensa y punta fina.

Para aplicar esta técnica de dibujo debemos partir de una estructura con líneas suaves de preferencia hechas con lápiz para poder borrarlas, seguidas de un sombreado con líneas en un mismo sentido que intensificarán las zonas oscuras mientras más líneas hagamos y más juntas las dibujemos. Podemos crear un rostro y darle volumen solo con un sombreado de líneas bien hecho.

También podemos trabajar usando dos o más colores de lapicero y dar énfasis a luces o sombras.

Combinando materiales:

Ser fan de una herramienta o material no debe alejarnos de hacer pruebas y experimentos. Es por esto que combinar materiales puede resultar en un gran acierto si nos aventuramos a hacerlo.

Podemos hacer una base de manchas de color usando Colores Acuaralables. Debemos dejar que seque muy bien antes de hacer un dibujo con lapicero sobre estas. Podemos partir de una idea preconcebida o podemos dejarnos guiar por las manchas de color y ver qué nos sugieren. También podemos probar con manchas de tinta. 

Sorprendernos siempre es muy rico.

Positivo y negativo:

Conforme practiquemos y nos sintamos cómodos dibujando con un lapicero, vamos a permitirnos probar técnicas arriesgadas. Hacer un dibujo en negativo significa crear un fondo muy oscuro dando gran cantidad de espacios en blanco a los elementos centrales o protagonistas del dibujo. Es de mucho provecho trabajar también el positivo que, por el contrario, deja más espacios en blanco alrededor de nuestros dibujos. 

Un ejercicio muy beneficioso es hacer el mismo dibujo en ambas versiones, logrando un contraste potente entre los dos. Usar un lapicero de tinta gel para este caso, evita que se corra la tinta en nuestro dibujo.

Bullet Journal y apuntes:

Los que somos fan de los BuJo y los apuntes como los Studygrams, sabemos  que un buen lapicero es indispensable, pues al usar muchos materiales de colores claros como Resaltadores Pastel y Neón y papeles diferentes, necesitamos uno que seque rápido y corra sobre todas las superficies. Los lapiceros de tinta gel como el Speed Dry, funciona de maravilla, pues al tratarse de textos, títulos y doodles, los manchones no se ven nada bien. 

Ahora que tenemos claro que los lapiceros no solo sirven para escribir la lista de la compra, es momento de empezar a usarlos para cosas super creativas y dejar que nuestro talento e imaginación fluyan con la tinta.