“Tres tristes tigres comieron trigo en un trigal”, probablemente hayas escuchado, repetido y memorizado este trabalenguas muchas muchas veces a lo largo de tu vida, en la escuela o en casa jugando con tu familia pues los trabalenguas son juegos de palabras muy populares entre los niños, sobre todo cuando están en la escuela primaria, ya que además de ser divertidos, son una herramienta muy útil y efectiva para mejorar varios aspectos del lenguaje de manera lúdica y libre de presión. 

¿Alguna vez pensaste que un simple juego de palabras podría ofrecer beneficios al desarrollo cognitivo de tus pequeños?. Pues actividades cotidianas como un juego de coordinación, una canción o un trabalenguas, tienen la misión de desarrollar y potenciar al máximo las habilidades y capacidad de cada niño y hoy hablaremos sobre lo productivo que puede resultar recitar uno o varios trabalenguas. 

¿Qué es un trabalenguas?

Son juegos de palabras que combinan fonemas o sonidos parecidos que se repiten una y otra vez, lo que dificulta su pronunciación fluida e ininterrumpida. Los trabalenguas tienen la finalidad de  crear conflictos en la repetición y dicción de algunas palabras con el objetivo de que los niños superen estas dificultades y desarrollen herramientas y habilidades para la construcción de un lenguaje rico en recursos.

Los trabalenguas son ejercicios de pronunciación que ejercitan la mente y los músculos orofaciales, pero que ofrecen además, otros grandes beneficios, pues al tratarse de un juego, permiten incluir gran cantidad de competencias sin que los niños se sientan abrumados o preocupados por cumplir o hacer bien el trabajo.

Beneficios de recitar trabalenguas

Jugar es sin duda alguna la manera más efectiva de ofrecer conocimiento a los más pequeños. El juego facilita el aprendizaje y motiva a las niñas y niños de todas las edades a participar, aprovechar y disfrutar de una experiencia en la escuela o en casa. Los trabalenguas no son la excepción y repetirlos puede ser una manera muy positiva de reforzar, consolidar o preparar nuevos aprendizajes. Algunos de los beneficios de los trabalenguas son:

Ejercitan la memoria: Para recitar ágilmente una trabalenguas, es muy importante saberlo bien,por lo que es una necesidad aprenderlos de memoria para que puedan concentrarse en la correcta dicción y pronunciación de las palabras. Los trabalenguas suelen ser cortos, por lo que no es imposible memorizar muchos de ellos. De esta manera, la mente y la memoria se mantienen activas y listas para cualquier desafío.

Amplían el vocabulario: Al tratarse de palabras rebuscadas con un fin fonético, muchas veces los trabalenguas aportan un gran número de palabras nuevas, por lo que el vocabulario de los niños se alimenta constantemente a partir de estos juegos.

Promueven la creatividad: No es extraño que los niños encuentren tan divertido recitar un trabalenguas, que inventen algunos de su propia autoría. Para esto deben buscar entre sus conocimientos o en el diccionario, palabras que sean complicadas de pronunciar y que puedan tener un significado muy divertido.

Mejoran la pronunciación: Al tratarse de palabras difíciles de pronunciar los niños deben ser muy conscientes de su dicción, utilizando cada uno de los músculos faciales que intervienen en el habla, haciéndolos más fuertes y mejorando sus niveles de comunicación oral.

Aumentan la concentración: Decir un trabalenguas no es cosa sencilla y las niñas y niños deben estar concentrados no solo para memorizar las palabras, si no para recordar cómo decirlas sin equivocarse, de manera veloz, ágil y sin interrupciones.

Mejoran las relaciones sociales: Las actividades divertidas suelen ser muy agradables y generan un ambiente cómodo y amable. Cuando los niños juegan con mamá, papá, hermanos, abuelos y tíos, se estrechan los vínculos familiares, se crea bienestar y se construyen recuerdos. Cuando los niños juegan con sus compañeros de clase o sus amigos, construyen relaciones de amistad saludables, mientras se trabaja la autoestima y la confianza en sí mismos. 

Fomentan el gusto por la lectura: Cuando los niños desarrollan el gusto por las palabras y los trabalenguas, la lectura es una consecuencia lógica y orgánica de este nuevo placer. Leer se convierte en una aventura extraordinaria que ofrece un mundo rico en imágenes, conocimientos, sonidos y nuevas palabras.

Ayudan a controlar emociones: Los trabalenguas nos hacen equivocarnos muchas veces delante de otras personas. Al ser un juego, estos errores se convierten en situaciones divertidas en las que las niñas y niños aprenden a reírse de ellos mismos con naturalidad y sin temor a hacer el ridículo, al mismo tiempo que aprenden a manejar emociones como la frustración cuando no logran recitar un trabalenguas al primer intento. 

Un trabalenguas puede ser mucho más que solo un simple juego de palabras y los beneficios que aportan en el desarrollo de los niños son muchos más de los que se ven a simple vista.

Jugar con los niños es siempre una gran idea y una excelente forma de reforzar y potenciar sus habilidades.