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Las mejores dinámicas para mejorar la confianza en los más pequeños

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La identidad de nuestros hijos se va construyendo y moldeando de acuerdo a las experiencia de vida que podamos ofrecerles, al ejemplo que damos al reaccionar a las distintas situaciones que vivimos y a los valores que inculcamos en ellos.

Los  niños son pequeñas personas con personalidad propia, gustos, fortalezas y debilidades, y muchas veces nos preocupamos tanto de su desarrollo académico que olvidamos trabajar en una parte muy importante de su personalidad: la confianza en sí mismos.

Las niñas y los niños necesitan desplazarse por el mundo para conocerlo y reconocerse como individuos llenos de capacidades, y la confianza y la seguridad son herramientas básicas para lograr esta exploración del mundo que los rodea y de su universo interior. 

Un niño inseguro puede perderse de las experiencias más potentes de su infancia por miedo al rechazo o a la frustración, perdiendo el contacto con sus pares y dejando de lado una parte determinante de su desarrollo como el aprendizaje a partir de la socialización.

Las  mejores dinámicas para mejorar la confianza en los más pequeños

La confianza en los niños no significa lograr todos los retos al primer intento o sacar buenas notas, ser quien tiene más amigos o ser líder en su grupo. La confianza en un niño significa  poder expresar sus ideas y opiniones, comunicar sus emociones, pedir lo que desea y decir que no a lo que no le gusta. Levantar su voz para ser escuchado, defender lo justo y aceptar que los errores son parte de crecer y que equivocarse es una manera de seguir aprendiendo. Los errores son puntos de partida para grandes cosas y no un final.

Trabajando desde casa

No es extraño que nos sintamos temerosos cuando detectamos ciertas conductas en nuestros niños, como la inseguridad y falta de confianza. Queremos que sean fuertes y en ocasiones recurrimos a los expertos buscando “corregir” algunos comportamientos. Y buscar ayuda está bien, es lo que debemos hacer cuando nuestros pequeños la necesitan y nosotros también, así que es importante felicitarnos por tomar decisiones y actuar sobre las dificultades. Pero en algunos casos podemos trabajar desde casa para potenciar las  fortalezas de nuestras hijas e hijos, creando dinámicas y rutinas que hagan crecer su autoestima y nutran su confianza en sí mismos.

En esta nota te damos algunos consejos para que empieces ya mismo.

Responsabilidades

Los adultos tenemos muchas responsabilidades y por lo general  hacemos todo sin ser conscientes de la cantidad de confianza que cada una de estas acciones requiere. Podemos dar responsabilidades dentro de casa a nuestras niñas y niños para hacerlos sentir que son importantes, necesarios y que hacen las cosas bien. Los niños deben asumir responsabilidades según la edad que tengan para que la experiencia sea positiva.

Cuidar de un ser vivo: alimentar a sus mascotas, sacarlas a pasear, regar las plantas.

Cuidar de su familia: preparar el desayuno los domingos, hacer la lista de las compras, hacer el menú de la semana, leer un cuento por las noches a mamá y a papá para que puedan descansar bien o a los hermanos menores (si los tienen).

Colaborar en casa: lavar los platos después de comer, ir a comprar, lavar el auto, cuidar que no queden luces encendidas, etc.

Es importante que estas acciones sean responsabilidad de los niños de manera constante y que cambien cada cierto tiempo para mantenerlos motivados, pero sobre todo es indispensable que sean tareas que puedan cumplir sin ayuda y sin dificultad para evitar la frustración en ellos.  

Valerse por sí mismos

Las  mejores dinámicas para mejorar la confianza en los más pequeños

Las niñas y niños deben poder hacer solos lo que ya están listos para realizar. Primero nos toca enseñar, pero luego debemos soltar para que pongan en práctica lo aprendido. Diseñemos junto con ellos, una dinámica de autosuficiencia en el cuidado personal.

Validar su presencia: Muchas veces los adultos preguntamos a otros adultos el nombre de los niños que están a su lado, como si ellos no pudieran responder por sí mismos. Cuando alguien te pregunte por el nombre de tus hijos cuando ellos están parados al lado, invítalos a responder por sí mismos y cuando te encuentres con otros niños, haz las preguntas directamente a ellos. De esta manera estamos validando la existencia y presencia de los pequeños, les damos importancia y los reconocemos como los seres capaces que son. 

Vestirse solos: Por las noches pueden elegir la ropita que vestirán al día siguiente y por la mañana vestirse sin ayuda (a menos que sea una prenda muy difícil). 

Lavarse: Cada mañana deben lavar manos, carita y dientes ellos mismos y recordar cepillarse después de cada comida. Aprender a ir solos al baño y tomar una ducha ellos solos. Para esto pueden hacer juntos un cartel con dibujos o fotos de lo que debe hacer para reforzar estas acciones y hacer más sencillo su cumplimiento. 

Comer: Los niños deben aprender a usar cubiertos, tazas y platos como cualquier otro miembro de la familia, de esta manera se sentirán grandes como papá o mamá y crecerá su confianza en ellos mismos.

Jugar:

La confianza puede ganarse a través de los juegos familiares o con actividades fuera de casa.

Juego de roles: Intercambiemos personalidades, por un rato yo seré tú, tú serás papá y papá será mamá. Puede ser una actividad muy divertida que muestre a los niños la forma en la que son percibidos dentro de casa. Aprovechemos este juego para mostrarles las cosas buenas de su personalidad. 

Tardes de charadas: Este juego es muy divertido y les da mucho protagonismo a los niños. Los equipos mixtos entre grandes y chicos son la mejor opción, pues demuestra que todos son igual de importantes.

Deportes: Los deportes siempre ayudan en la construcción del autoestima de los niños. Si los niños están interesados genuinamente, es una actividad de mucho provecho.

Las  mejores dinámicas para mejorar la confianza en los más pequeños

Teatro: Los talleres de teatro pueden catapultar la personalidad de nuestros niños, reafirmando su confianza y seguridad interior. Puede hacer que su voz tenga la fuerza que necesitan para decir lo que piensan y no sentirse pequeños cuando están delante de otras personas.

La confianza en nuestros niños nace de la forma en la que nos comportamos a su alrededor. Si los tratamos con respeto y validamos sus capacidades, ellos crecerán con la confianza que necesitan para lograr lo que se propongan.

Recordemos celebrar sus logros, decirles que estamos orgullosos de ellos, darles la tranquilidad de que el tiempo y la práctica traerán lo que aún no llegó, no los comparemos con otros niños y que nunca duden del amor que sentimos por ellos y de que son únicos y maravillosos.

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