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10 consejos para que la educación a distancia sea positiva

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Suena el despertador, es lunes, empieza una nueva semana y junto con ella, tu labor de madre, profesional y maestra, también. El mes pasado no imaginaste que cuando te mandaron a casa junto con tu familia durante dos semanas ibas a asumir las riendas de la educación de tus hijos como nunca antes lo hiciste ¿No?.

Recibes correos electrónicos con cronogramas semanales, horarios de conexión con los maestros, hojas de trabajo que debes imprimir (o transcribir si no tienes impresora) y reuniones virtuales de padres y maestros. Pero sobre todo tienes que encontrar el tiempo para acompañar a tus hijos (más si son pequeños) y buscar la forma ideal de ayudarlos a entender cada uno de los nuevos conocimientos que deben adquirir, mientras te quedas sin computadora durante varias horas, lo que es un problema si teletrabajas y si tienes más de un hijo en edad escolar que comparte horarios de conexión (pero sin duda eres una lechera sólo por tenerla). 

La verdad es que la logística no es el principal problema, porque  siempre la resuelves. Pues como es bien sabido, la organización es uno de los superpoderes que te otorga la maternidad: Duplicas conexión a internet  usando solo un palito de dientes y un frijol, haces  80 hojas de trabajo durante la madrugada y te levantas al alba para dejar listos desayuno y almuerzo.

Pero lograr que tus niños perciban como una experiencia positiva la educación a distancia, eso sí es un reto. Y no porque no seas capaz de transmitir información o conocimientos, si no porque todo sucede al mismo tiempo, todo suele requerir de tu participación y tu acompañamiento y a pesar del mito que se teje alrededor de las madres, no, no eres un pulpo con 8 brazos.

Necesitas encontrar una forma de hacer que esto funcione, si o si, y aunque cada familia es única e irrepetible, te dejamos una serie de consejos que tal vez te ayuden a lograr lo que necesitas.

Destina un espacio  para el trabajo de tus hijos. Busca un lugar donde puedan sentarse cómodamente al momento de hacer sus deberes o sostener una comunicación virtual con maestros y compañeros. Un espacio con mucha luz natural (de ser posible), donde puedas poner una plantita, sin que eso reste lugar para los cuadernos o libros en la mesa. Asegúrate de tener una buena conexión a internet desde ese espacio y tomacorrientes  cerca para enchufar los aparatos electrónicos que tus chicos deban usar.

Visibiliza el horario de trabajo. Con todo lo que tienes que tener presente, tu carga mental está al límite y necesitas de todo lo que te ayude a fluir de manera amable y productiva. Prepara un cuadro de organización sobre una cartulina, un papel o sobre la pared, con los horarios y objetivos que tus hijos (y tu) deben seguir cada día. Esto evitará que se pierdan de alguna clase virtual, fecha de entrega, grupo de trabajo o cualquier cosa importante. 

Puedes trabajar con Sticky Notes para usar la pared como una gran pizarra y organizar toda la semana por colores. 

Una cartuchera para trabajar. Nadie quiere buscar desesperadamente un borrador o el único tajador que hay en casa, así que su cartuchera debe tener siempre: un lápiz, un tajador, un borrador y una regla. Colores y plumones deben estar a la mano, al igual que una goma,  cinta adhesiva y papel. Pero sobre todo ten en cuenta que estas cosas deben estar al alcance de sus manitos para fomentar  independencia y autonomía.

Abre una nueva cuenta de correo electrónico o destina una carpeta en tu compu para que todo lo que recibas  del cole  llegue o se guarde ahí, y no te confundas con las otras tantas comunicaciones que recibes.

Pausas y descansos. Durante las horas de trabajo escolar, haz una o más pausas con los niños cada cierto tiempo. Eso los ayudará a sentirse menos cansados, aburridos o agobiados por la cantidad de tareas que deban hacer. Es como tomar aire antes de zambullirse en el mar: lo necesitan.

Déjales un tiempo para el juego. Todo el día no puede tratarse de trabajo, tareas y responsabilidades, el juego y el ocio son igual de importantes, sobre todo si hablamos de niños pequeños, por lo que te recomendamos destinar un tiempo de actividades libres que ellos deben manejar según sus deseos y necesidades. Pero no olvides conversar en casa sobre lo importante que es cumplir con el trabajo para disfrutar de nuestro tiempo libre sin pendientes.

Haz un plan de trabajo que ellos puedan cumplir a diario. Esta es una tarea difícil, pues necesitas articular un plan de acción que contemple tu trabajo, los quehaceres de casa, las sesiones virtuales, las tareas y el tiempo de familia, cada día. Tal vez sería más fácil dedicarle un  día entero a hacer tareas, pero tus niños difícilmente lo soporten, así que la clave es dosificar el trabajo para que ellos puedan realizar la mayor parte sin que estés sentada al lado. 

Mantén vigente la hora de ir a dormir de lunes a viernes. En una situación ordinaria, tus niños cumplen una rutina con horarios fijos, ¿no?, pues no es momento de cambiar esos horarios. Por complicado que resulte, es mejor que durante la semana escolar tus niños se acuesten temprano para poder descansar y cumplir con sus responsabilidades (aunque no salgan de casa para hacerlo) estando frescos y  al cien por ciento de sus capacidades. 

Intenta no enfadarte.Todos los niños son diferentes entre sí, incluso los hermanos, por lo que cada uno tiene un ritmo distinto para entender el mundo que lo rodea. Algunos niños necesitan más tiempo para lograr lo que otros pueden resolver fácilmente . Por eso, cuando veas que no avanzan como esperas, no pierdas la calma, no te frustres  y pasa a otra cosa o pídeles que tomen un vaso con agua o se levanten de la silla para estirarse (cualquier cosa que los ayude a desconectarse por un minuto, es válida). Después de eso es más fácil retomar  desde una  perspectiva fresca y positiva.

Celebra sus logros. Esta nueva realidad, nos pone a prueba a todos, y cada día que termina habiendo cumplido con los objetivos trazados, es un avictoria que debe celebrarse, así que no olvides felicitarlos por cumplir con lo que les toca y sobre todo, por hacerlo con voluntad y esfuerzo.

Finalmente, cuando hayas terminado, cierra la computador, apaga la tablet y libérate del teléfono para poder estar juntos como familia. No te agobies tratando de cumplir un modelo de organización. Toma los consejos que puedas aplicar en casa, pues lo más importante es encontrar un ritmo que los ayude a mantener una vida en armonía, construyendo una convivencia saludable.

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